Revisión y estudio crítico de la última elaboración inédita de Modesto Medina Bravo, autor que residió durante los años veinte en León y quien, cincuenta años después, ya anciano, fue capaz de revisar las notas de la visita que realizara a la población de Canseco en 1929. No volvería más a ella, pero, a pesar de este inconveniente, decidió llevar a cabo un último reto en el ejercicio de estudio investigación de este ámbito (la geografía), mi Canto de Cisne, como relata el propio autor al principio del texto que nos ha legado y que lleva el título de la misma obra.